domingo, 26 de julio de 2009

¿Es la idea de Dios una idea adaptativa?

Así como hace un tiempo se habló de un gen gay, ahora parece haber un gen de la creencia en Dios, que además es adaptativo. Parece cumplir la función, positiva, de aumentar la supervivencia evitando que la angustia y el miedo hagan que una persona escape a los fines reproductivos y se sumerja en la depresión, o que se suicide por no encontrarle sentido a la vida. Se trataría, entonces, de una idea reguladora: el noventa porciento de la gente cree en Dios, aunque Dios no existe, porque su desarrollo cerebral, necesario, por otra parte, para la supervivencia, la lleva a angustias y depresiones que otra variación genética compensa evitando que la especie se extinga por un suicidio masivo.
Esta no es una idea nueva. Nietzsche, filósofo de fines del siglo XIX, había postulado también que lo que llamamos verdad es una serie de ideas que son útiles para la supervivencia. Por ejemplo, es útil pensar que el Sol sale y se pone, y regular nuestra vida en función de esos ciclos, aun cuando sepamos que es la Tierra la que gira sobre su eje dando la apariencia de que el que se mueve es el Sol. Pero de esta manera, sostenía Nietzsche, la verdad no se distingue de la mentira útil, con lo cual la búsqueda de la verdad por la verdad misma se convierte en una tarea que va en contra de la vida, y que puede llevar a su propia destrucción. La búsqueda de verdad inaugurada por el cristianismo, por ejemplo, habría llevado a la revolución científica que terminó por prescindir de Dios como causa primera del mundo.
Ahora bien, sostener que Dios no existe va, entonces, en contra de nuestra supervivencia como especie. Eso significa que, si filosofías ateas como el darwinismo se propagan, el resultado será depresión, disminución de la tasa reproductiva, y extinción de la especie. ¿Cuál es entonces el carácter adaptativo que justifica la existencia del gen que hace que tanta gente sea darwinista, yendo en contra de la supervivencia de la especie?
Copyright Daniel Omar Stchigel. Derechos reservados.

2 comentarios:

asimov dijo...

Eso significa que, si filosofías ateas como el darwinismo se propagan, el resultado será depresión, disminución de la tasa reproductiva, y extinción de la especie.

Falso. Será todo lo contrario precisamente.

salu2.

DOS, MEG dijo...

Entonces, el Darwinismo se contradice a sí mismo, pues postula la necesidad de la idea de Dios,contra la cual lucha, pero contra la cual, entonces, es vano luchar.
Daniel